lunes, 24 de agosto de 2015

Esto no hay quien lo aguante



Por encima de cualquier ideología, por encima de cualquier frontera, por encima de cualquier bandera, están todas y cada una de las personas.
Hace unos años mantuve una conversación con una niña de mi calle sobre este tema, ella con lagrimas en los ojos me pedía a mi una explicación, me decía: – pero que coño pasa aquí, esto no hay quien lo aguante. Yo le dije: - tranquila que esto sólo puede ir a mejor.
Años mas tarde volví a hablar con esta chica ya hecha mujer y ésta me decía.
yo solo quiero que no me jodan.
El país vasco o euskalherria, pese a quien pese, tiene su identidad formada por gente noble que tiene por encima de todo un deseo, desea la Paz.
Yo creo que la identidad de un país no la deciden los políticos de turno, duela a quien le duela; La identidad de un país se forma siglos a siglos, las fronteras las ponen gentes a las que les da igual dividir a un país por la mitad, por encima de todo esto, está la convivencia de las personas que día a día tratan de llevarse bien con su vecino ayudándole y recibiendo ayuda de éste de corazón y con buena voluntad.
Yo como nacido en el país vasco y descendiente de salmantino y vasca, descendiente a su vez de santanderinos, recuerdo cuando era crío; en mi calle éramos once chavales, vascos y “emigrantes españoles”; Recuerdo que éramos una piña sin distinción alguna, por que no teníamos los prejuicios de la gente mayor, tú te portabas bien y eras uno más de la cuadrilla; nadie nos había comido la cabeza con que si tú eres de aquí o allá, lo único que nos importaba era saber que podíamos contar los unos con los otros para lo que fuera.
Yo pienso que no hay mayor inteligencia que la de los niños a la hora de convivir, Sí, a veces son crueles, pero no lo hacen con maldad, ni para discriminar, un niño lo primero que hace cuando va al colegio es conocer a sus compañeros, y ya que estamos todos juntos en este barco que se llama mundo, lo mejor que podríamos hacer es conocernos todos, y eso implica respetar nuestras diferencias, nuestra cultura o por decirlo así nuestra idiosincrasia.
Alguien dijo una vez, “no hay un camino para la Paz, sino que la Paz es el camino”; las fronteras como todos sabemos son un invento del hombre, no son algo natural, y en la coyuntura política en la que estamos, me refiero a la unión europea, cuantos menos intermediarios, mejor para el pueblo; Si de lo que se trata es de labrar nos un futuro en común todos los humanos, deberíamos de empezar por abolir de raíz todo ápice de diferenciación, como sabemos nadie es más que nadie y todos somos iguales, el destino de la humanidad pasa por conocernos, respetarnos tanto humanamente como culturalmente y conducir al ser humano a donde debe estar. Si de verdad hay voluntad de hacerlo, se puede conseguir.
Bienaventurados todos los hombres de buena voluntad. Nada es imposible, las cosas se pueden hacer humanamente bien, si hay voluntad de hacerlo. Particularmente si de mí dependiera yo encerraría a todos los miembros de la ONU y no los dejaría salir hasta que solventaran por lo menos dos problemas, solo dos: el hambre y las guerras.

Manuel Sánchez Diego

No hay comentarios:

Publicar un comentario